"Magritte"
“Y de repente un extraño”
Mi pluma ha de ser,
Y será, ¡siempre!,
Cual navaja bandolera
Apostada en la faltriquera
Y presta a remendar
La vileza y la desigualdad.
Yo, nunca, he sido yo,
He sido un extraño,
El extraño que habita en mí.
Pero ese extraño construido,
Ese que vive escondido,
Ese que hurga en mis naufragios
Y en mis muchos desengaños,
Ese extraño recita versos;
Que hablan de mansedumbres,
De servidumbres pesarosas,
De ríos macilentos, ¡amarillos!
Me miro en el espejo
Y no veo mi pálida cara,
Hay un chaval que me mira
Con ojos sorprendidos, incrédulos,
Una figura que se pregunta
Quién vive en su reflejo.
Quisiera hablarle, que escuchara,
Decirle del agua clara,
De mi navaja bandolera, oxidada,
De mi pluma ya gastada
Escribiendo su vida verdadera.
J.S.P - 2009
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