"Pipirrano-Terapia" - Fitur 2012

- Güevos a la Mazarronera -

Juan Sánchez.

Se acerca la feria más importante para el turismo de nuestro país: Fitur 2012. Y un servidor no puede por menos que aportar su granito de arena en forma de sugerencia gastronómica. Y por aquello de arrimar el hombro en la impensable tarea de sacar a Mazarrón del pozo de los deseos defraudados, y perdidos en el ‘bouquet’ de esos ‘güevos a la funerala’ que nos desmadran el bancal de ajos y cebollinos municipales. En fin, ahí va mi receta promocional para  nuestro pueblo… (Puntos suspensorios)

“Pipirrano-Terapia” (Dos puntos para set y partido repartido):

 Ingredientes:

1)- Se coge un ‘rano’, o dos, depende la cantidad de turistas que queramos espantar. Es condición ineludíbrica, que los susodichos ‘ranos’ hayan estado en maceración por un periodo no inferior a cuatro años en la corporación municipal de Mazarrón. Además, han de ser de doble saca, -y arrastro todo lo que puedo-. Esto es, haber nadado sin nauseas en las turbulencias políticas de esas tan gravosas como inútiles desalinizadoras, recalificaciones y urbanizaciones fantasmales, como ellos, puertos deportivos naufragados antes de ser ‘votados’, cercanos parques temáticos con el único tema de ‘reorganizar’ los cuartos públicos, magreos de cantimpalo a subvenciones y presupuestos locales, regionales, nacionales, europeos y demás proyectos meto-manos, siempre con la pasividad del pueblo: Mazarrón, Murcia, España, pa qué más lejos. ’Tomate-Terapia’, ya te digo. (Punto y seguido).

2)- Bueno, se cogen un par de ranos (O dos pacos, lo mismo da que da lo mismo), seamos generosos, se les da mando en plaza, se les ‘sugiere’ acatar los caprichitos de los que mandan romana (Innecesario nombrarlos, ya saben ellos quienes son, y nosotros también). Y, tras haber hecho bicarbonato las posibilidades de promoción y consolidación de una oferta turística en Mazarrón – Claro está que obedecen a sus propios intereses, la duda ofende- se les premia, vuelta y vuelta, con la vida resuelta y cobertura legal suficiente para entrar en el selecto club de los intocables de Eliot Capone Press. (Punto y perseguido).

3)- Tras el refrito de ranos, siempre bien guarnicionados del blenorrágico lubrificante social, por suavizar el mosqueo del pueblo, na más, se ponen en el escaparate del pasteleo municipal las convenientes piezas del juego pasado por los calzoncillos del amo, para distraer al ciudadano y dar una imagen de pulcritud democrática, con fines afilados para seguir con el guisote de batracios. Se pasa todo por la turmix de unas elecciones, et voilá ‘Marmitaco de ordeño y mando’. (Punto y a partes iguales).

Elaboración del plato potaje:

Mirad lo que os voy a decir, niñatos,  capullitos de la ‘rosa’ de pitiminí: habéis perdido toda credibilidad y confianza del ciudadano. No sois, ni por asomo, los mejores gobernantes para Mazarrón. Los escaparates son para las comadres, la gente medianamente informada no se nubla los ojos con el oropel y la estupidez de vuestros egos. No hay que centrarse en el timón, hay que gobernar la nao pensando en los pasajeros. Las medallas son para los héroes de guerra, y no para zopencos con legañas bien pagadas por los de siempre. Tengo la boca y el alma cansada de soportar los mismos tarugos e ineptos apegados al tele-mando de las panzas agradecidas. Tengo el corazón en carne viva de ver a la gente pasarlo fatal, mientras cuatro pela-ratos se jactan de hacer las cosas por el bien común. Es hora de romper las cadenas de oro y miel que os anudan a la pata la cama del señorito. Es hora de demostrar que los tenéis bien puestos. Es hora de mirar sin condiciones por y para el pueblo. Y no me valen más disculpas, ni más plazos, ni más conveniencias disfrazadas de tradición traicionera a los nuestros: el pueblo de Mazarrón. ¿Queréis ser recordados como buenos gobernantes? Pos, ¡Pijo!, ¡ganároslo! (Punto rematao).

 Presentación:

Se sirve el plato acompañado de un par de güevos a la mazarronera (O a ‘la funerala’, lo mismo da). Y… ¡Bon appétit!